a. Gerocultoras/es: constituyen el principal pilar de la residencia. Prestan atención y cuidados asistenciales de forma permanente y personalizada a todos los residentes.

b. Asistencia médica: una doctora del Centro de Salud del Servicio Navarro de Salud realiza la valoración y seguimiento integral de los problemas de salud, agudos y/o crónicas, de nuestros residentes. 

c. Enfermería: un equipo integrado por cinco enfermeras atienden diariamente a los residentes para prevenir patologías, cuidar su salud y conservar su autonomía. 

d. Asistencia psicológica: una neuropsicóloga evalúa de forma periódica e integral a los residentes. Presta intervención terapéutica ante dificultades de adaptación, procesos de duelo, trastornos del estado de ánimo, ansiedad, etc. y rehabilitación cognitiva, tanto de forma individual como grupal (talleres de estimulación). 

e. Rehabilitación física: la fisioterapeuta trabaja en el mantenimiento y la mejora de la condición física de los residentes, así como interviene en procesos de rehabilitación física tras fracturas, lesiones, etc.

f. Dietética y nutrición: una dietista evalúa el estado nutricional y las necesidades de cada persona para establecer pautas alimentarias adecuadas así como diseña los menús, garantizando que sean equilibrados y completos nutricionalmente. 

g. Trabajador social: atiende las solicitudes de ingreso, las gestiones y trámites con la Administración y los Servicios Sociales, escucha e impulsa las sugerencias de los residentes y sus familiares, recoge la historia de vida y elabora la ficha personal de cada residente,  entre otras funciones. 

h. Terapia Ocupacional: valora la capacidad funcional de la persona mayor para la realización de actividades cotidianas así como los apoyos que precisa, con el objetivo de fomentar un mayor grado de independencia. También desarrolla diversas actividades para disfrutar en el tiempo de ocio.